domingo, 1 de junio de 2008

Falleciente: presente activo de "fallecer"



Epitafio:


Un pájaro vivía en mí.

Una flor viajaba en mi sangre.

Mi corazón era un violín.


Quise o no quise, pero a veces me quisieron.

También a mi me alegraban:

La primavera, las manos juntas, lo feliz.


¡Digo que el hombre debe serlo!


(Aquí yace un pájaro.

Una flor.

Un violín.)


Juan Gelman


"Epitafio" me habla de la muerte, por su título y por su conjugación verbal en tiempo pasado. Pero este no es cualquier pasado, sino uno donde el autor era feliz, ya que parece conocer esa sensación donde lo habitaban pájaros, flores y violines por doquier. Nunca deja de señalar en el poema a esa otra persona que lo acompañaba con "las manos juntas".


Desconcierta encontrar un paréntesis, ya que es poco común la ubicación de estos signos al final de un texto. No puede saberse si se trata de la adición de algún dato faltante o del mismo epitafio del cual habla el poema. El hecho de que el paréntesis esté escalonado representa un descenso, idea muy vinculada con la muerte, donde lo que representaba la felicidad unos renglones atrás se va desvaneciendo hasta que, finalmente, cae.


¿Qué es realmente lo que se murió? ¿Una persona o solamente una parte de ella?


El epitafio es un escrito sobre la tumba, donde supuestamente está el nombre de la persona falleciente. Pero nuestro epitafio no tiene ningún nombre, sino ciertas palabras que gracias a la lectura del poema sabemos que son las características de la persona que era feliz.


El epitafio de Juan Gelman anuncia la muerte de la felicidad.


Luli Setton

1 comentario:

Verónica Pena dijo...

Primero que nada, perdón pero el editor no me deja modificar los espacios para mostrar la escalera final de los versos de Gelman, a los que alude Luli en su análisis.

Luego, hacer públicas mis felicitaciones a Luli, por este texto, contar a todxs la alegría que fue ser testigo del encuentro hondo de Luli con este poeta que la atravesó.

Finalmente, contar algunas de las dificultades interesantes de la corrección de este escrito: por una parte, hay algunos conectores que en otro caso hubiera corregido rápidamente... "Donde" utilizado para referir al pasado, en lugar de "cuando", por ejemplo. Pero justamente, en el desarrollo del texto hay una espacialización del tiempo que ancla en su textualización: el tiempo es el texto del poema, palabras antes o después. Así que no me animé a corregir tan rápido esta vez. Y menos eso de "falleciente" que ha inventado con poética necesidad (que toda la justicia de la poesía, la ferviente necesidad de decir): porque no ha "fallecido" y mucho menos lo hace en la pasividad del participio pasado, no está en el pasado; fallece presente y de manera activa en el poema, escribiendo esa muerte que no cesa (maldita manía de la muerte y toda su violencia de no cesar).